Dicen que los tesoros mejor guardados son aquellos donde permanece latente lo que verdaderamente les hace grandiosos ante el ojo de quien lo observa. Un ejemplo de ello es este hotel de 3*, un edificio que se alza en segunda línea de playa de la turística Altea, y que forma parte inherente de la historia y el presente de la villa mediterránea.
El impresionante edificio, que cuenta con siete habitaciones de elegancia atemporal, ocho baños, un salón – recepción y una terraza en la parte superior con vistas abiertas a la localidad combina comodidad y estilo. Su arquitectura única, inspirada en el modernismo popular de la época, es un testimonio del rico pasado de la ciudad. Los detalles meticulosamente elaborados, como los suelos hidráulicos con dibujo de alfombrado, las barandillas de madera de alta calidad, las balaustradas y los pasamanos son detalles que te transportarán a tiempos de máxima sofisticación.
Su interior envuelve a quien accede y proporciona un determinado nivel de lujo, aspecto de modernidad y máxima eficacia en la disposición de las habitaciones y espacios comunes. Destaca, además, la gran sala de estar con un atractivo juego de escaleras y la calidad de la carpintería tanto exterior como interior.
Dicen que los tesoros mejor guardados son aquellos que tienen historias aún por descubrir y experiencias por vivir, y este hotel, aunque ya ha vivido muchas, esta listo para comenzar una nueva con aquellos que estén dispuesto a descubrirlo. ¿A qué esperas para invertir?
El impresionante edificio, que cuenta con siete habitaciones de elegancia atemporal, ocho baños, un salón – recepción y una terraza en la parte superior con vistas abiertas a la localidad combina comodidad y estilo. Su arquitectura única, inspirada en el modernismo popular de la época, es un testimonio del rico pasado de la ciudad. Los detalles meticulosamente elaborados, como los suelos hidráulicos con dibujo de alfombrado, las barandillas de madera de alta calidad, las balaustradas y los pasamanos son detalles que te transportarán a tiempos de máxima sofisticación.
Su interior envuelve a quien accede y proporciona un determinado nivel de lujo, aspecto de modernidad y máxima eficacia en la disposición de las habitaciones y espacios comunes. Destaca, además, la gran sala de estar con un atractivo juego de escaleras y la calidad de la carpintería tanto exterior como interior.
Dicen que los tesoros mejor guardados son aquellos que tienen historias aún por descubrir y experiencias por vivir, y este hotel, aunque ya ha vivido muchas, esta listo para comenzar una nueva con aquellos que estén dispuesto a descubrirlo. ¿A qué esperas para invertir?